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Naturalmente Saludables

Naturalmente Saludables

¿Sabías que las almendras son un tesoro de beneficios para tu salud? Estos deliciosos frutos secos, libres de gluten, no solo son irresistibles en sabor, sino que también se han ganado un lugar especial en tu corazón y en tu dieta. Permítenos llevarte a un viaje por las maravillas nutricionales de las almendras.

Nutrición en un Puñado: Las almendras son una fuente inigualable de nutrientes esenciales para tu cuerpo. Están cargadas de vitaminas E y B, actuando como poderosos antioxidantes. Además, son un almacén de energía, proporcionando una combinación perfecta de grasas saludables, carbohidratos, proteínas y minerales, incluyendo potasio, hierro, fósforo, zinc, magnesio y una generosa dosis de calcio. ¡Un sustituto ideal para los productos lácteos!

Valores Nutricionales por 100g de Almendras:

  • Calorías: 589 Kcal
  • Ácidos grasos saturados: 4,5 g
  • Carbohidratos: 5,7 g
  • Proteínas: 24 g
  • Fibra: 11,4 g
  • Potasio: 6 g
  • Fósforo: 4 g
  • Calcio: 2 g
  • Vitamina E: 24,9 mg

Consulta el informe completo aquí.

Recomendación Diaria: Los expertos en salud sugieren incorporar alrededor de 15 a 20 almendras diarias en tu dieta, ya sea crudas, tostadas o como parte de tus platos favoritos. Esta cantidad, aproximadamente 24 gramos, aporta unas 150 calorías, ayudándote a mantener un equilibrio en tu alimentación.

¡Prueba esta Receta Saludable con Almendras Donaire!

Ajoblanco: El ajoblanco es una deliciosa sopa fría muy popular en Andalucía que te dejará con ganas de más. Aquí tienes cómo prepararla:

Ingredientes para 6 personas:

  • 100 g de pan del día anterior
  • 250 ml de agua
  • 1 diente de ajo
  • 175 g de almendras crudas
  • Media cucharadita de sal
  • 1 cucharada de vinagre de vino blanco
  • 75 ml de aceite de oliva suave
  • Uvas verdes sin semillas para la guarnición

Instrucciones:

  1. Remoja el pan en agua.
  2. Elimina el germen del ajo.
  3. Coloca las almendras, el ajo, la sal, el vinagre y el aceite de oliva en una batidora.
  4. Agrega el pan remojado.
  5. Tritura todo hasta obtener una mezcla suave y luego refrigérala durante 2 horas.
  6. Corta las uvas en trozos pequeños.
  7. Sirve el ajoblanco muy frío, acompañado de uvas y un toque de aceite de oliva.

¡Con almendras, estás cuidando de tu salud mientras disfrutas!